Mientras el nuevo coordinador de la bancada del PRI en el Senado rechaza ser entreguista y ofrece mayor cercanía con Alejandro Moreno, el legislador removido apuesta a la destitución del líder nacional de su partido.
Voy a ponerlo como desquite: Osorio Chong
Miguel Ángel Osorio Chong Rompió con firmeza con el dirigente nacional de su partido, Alejandro Moreno, y con el grueso de la bancada que hasta la noche del miércoles coordinaba, pero ahora no sabe qué escaño va a ocupar.
Después de haber sido defenestrado, el senador Miguel Ángel Osorio Chong dice que el camino que tiene por delante es tumbar a Alito, sin importar el asiento que pueda ocupar.
Osorio Chong había pensado en apartarse de la bancada, pero fue prevenido de que, si lo hacía, perdería su militancia en las filas del tricolor.
Por lo pronto, espera la resolución que adopte el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) sobre el futuro inmediato de Moreno, después de haber impugnado las maniobras del campechano para prolongar su liderazgo.
«Voy a confiar en que el TEPJF ratifique lo que dijo el INE, y que tenga que llamar a elecciones para renovar el CEN», indica.
¿Y su futuro dentro del Senado?
Seguiré ahí, seguiré alentando que el bloque opositor esté unido. Se requiere, por el bien del País, que sigamos juntos.
¿Qué escaño va a ocupar?
No lo sé. Tiene que venir un reacomodo, y estoy abierto a que esto se dé. Yo no tengo ningún problema: el lugar no te da el trabajo ni el prestigio.
¿Lo podríamos ver en otra bancada?
No, no. Definitivamente no, porque no puedo defraudar a esos priistas que tienen esperanza de que Alito ya no sea dirigente; tengo que seguir, por convicción, dentro del PRI.
Pero no dentro de la bancada.
Seguiré en la bancada de una manera más discreta: si me hago independiente o me salgo de la bancada, los estatutos dicen que me expulsan y no quiero darle ese gusto, porque si no ya no puedo seguir con la impugnación. Sigo, pero no estaré participando dentro del grupo.
¿Qué perspectivas ve con el liderazgo de Manuel Añorve?
El riesgo es que Alito dicte indicaciones para los votos, que dé línea. Nosotros no lo permitíamos, nunca le gustó. En la reunión de hace cuatro semanas me dijo: ‘Es que aquí dice que tienen que votar como yo digo’. Y le respondí: ‘No, eso es ofender la libertad de los senadores. Es más, ni se lo digas a los senadores’.
¿Pensó que después de esa reunión, las aguas recobrarían su nivel?
Es que no se conoce a Alito, porque él no sabe de acuerdos, miente, engaña, y yo busqué dar a mi grupo cohesión.
¿Se verá mermada su capacidad de interlocución?
No. Me he dedicado a la conciliación y a los acuerdos. No estaré en el protagonismo. Me toca hacer llamado a los acuerdos, pero no asumir lo que no me corresponde dentro del grupo. Mi trabajo es lo que va a enseñar de qué estoy hecho.
Dos coordinadores (Manuel Velasco, del Verde, y Clemente Castañeda, de MC) dijeron que era bienvenido si tocaba la puerta.
Ah, como en el futbol americano, en el draft. Déjame ver si hay buenos acuerdos, ja ja ja. Tengo un compromiso con la militancia que tiene la esperanza de que pueda seguir en el PRI.
¿Tiene para después del 24?
Tengo qué observar qué siguen haciendo en el partido, observar qué sigue en el INE, porque se puede ir Alito y puede suceder que al otro día nombre a un incondicional. Esas cosas inciden en la toma de decisiones.
¿Esto es una venganza de Alito?
Voy a ponerlo como desquite; no le gusta que nadie le lleve la contra.
‘Soy hombre de acuerdos’
En el Pleno, su paisano, el morenista Félix Salgado Macedonio, fue uno de los senadores que felicitó con mayor efusividad a Manuel Añorve, quien andaba de arriba para abajo en su nueva condición de coordinador de la bancada del PRI.
«No soy entreguista», zanja el ex Alcalde acapulqueño, muy dado a tomarse fotos con funcionarios del actual Gobierno.
Aficionado al box, al buceo y al pádel, Añorve asegura que su amigo Alejandro Moreno, líder nacional del tricolor, no lo puso al frente del grupo.
«La bendición me la dio la mayoría», presume.
El miércoles pasado, Alito había removido a Miguel Ángel Osorio Chong como líder del grupo de 13 senadores. Manuel Añorve entró al quite y ayer se placeó en el Pleno en su nuevo cargo.
En entrevista, Añorve promete encabezar una coordinación orientada a la búsqueda de acuerdos y consensos, hacia el interior y exterior.
«Tenemos que establecer una mesa de trabajo con la bancada de diputados, con Rubén Moreira (el coordinador), porque hay muchos legisladores que quieren saber el destino de sus iniciativas que están paradas», expresó.
¿Es una ventaja o una desventaja su cercanía con Alito?
El presidente de nuestro partido merece respeto. He sido legislador muchas veces, con mi amiga Beatriz Paredes, con mi amigo Manlio Fabio Beltrones. He sido diputado local, tengo una carrera parlamentaria y siempre debe haber comunicación con el presidente del PRI, es normal. Alejandro Moreno está en disposición de escuchar a todos.
Pero no sólo hay buena comunicación con Alito, es patente su cercanía con él.
Soy miembro del CEN, fui enlace entre la bancada y el CEN. Yo no voy a negar una amistad que tengo con Alejandro Moreno, también sería algo que ni siquiera me atrevería a comentarlo. Pero qué bueno que tengo una buena comunicación con él, porque seré facilitador con mis compañeros de bancada.
También se le atribuye cercanía con Morena… Soy un hombre de acuerdos. Cuando digo que soy un coordinador que buscará acuerdos internos y externos, pues es con las fuerzas políticas que representamos en el Senado a este país. Por supuesto que tengo comunicación con Ricardo Monreal y sus aliados, pero esto no es un cheque en blanco. Hoy he platicado con todos los coordinadores parlamentarios. Yo voté en contra de la revocación de mandato y consulta popular, cuando querían que apareciera el Presidente en la boleta en la elección intermedia. Después voté favor de la Guardia Nacional, voté en contra de la reforma que quería desaparecer el INE y en contra del ‘Plan B’.
Mi papel en la relación con la Oposición no es un cheque en blanco. Somos una oposición responsable y, a veces, dura. Vamos a seguir construyendo con el grupo de contención. Yo no soy entreguista, soy hombre de acuerdos.