¡Entre semana!
14 de febrero 2023
Eduardo Ángel Cinta Flores
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En el año de 2020 la Secretaría de Salud confirmaba déficit de médicos especialistas en México, decía que el mayor número de ellos se concentraba en la Ciudad de México, Nuevo León y Jalisco, dejando a un lado a las comunidades rurales.
Meses antes las Instituciones de Seguridad Social por instrucciones de la presidencia de la república, se dieron a la tarea de reducir salarios a los Médicos Especialistas y/o cancelar su contratación si se oponían a ello. La razón que dio el presidente fue que todos deben ser Médicos Generales para atender a toda la población en general sin distingos elitistas, orientando a las Instituciones a la indebida recepción de la población que fuera atendida por el Seguro Popular y que el ineficiente INSABI nunca pudo. Disposición que fue repudiada por los derechohabientes ya que se incrementaría la falta de atención médica en cantidad y en calidad, como también la carencia de más medicamentos.
Decisión tomada con la visceralidad de muchas otras, sumada a las del cambio de la forma de adquisición de medicamentos que originó su escasez, hoy permanente, y a la falta de infraestructura médica de primer nivel como son policlínicas, centros de salud, consultorios y otros, donde asisten profesionales como Médicos Familiares y Comunitarios, Pediatras, Ginecólogos, Médicos Generales. Decisiones tomadas, como todas, al capricho, al odio a lo que anteceda, a todo lo que huela a neoliberalismo, todo lo que no sea igual a su imagen y semejanza, todo … se hizo sin PLANEACIÓN.
Esto fue la justificación para que el presidente Andrés Manuel López Obrador pactara la contratación de 585 médicos cubanos supuestamente de especialidad, cualidades profesionales que nunca pudieron acreditar. No fue la primera vez que el presidente diera la espalda a la salud y a los médicos mexicanos, hubo sin número de manifestaciones por los auténticos Médicos mexicanos que se encontraban desempleados y que le gritaban que había suficiencia de especialistas en el país, ¿para qué importar a seudo facultativos en búsqueda de socializar al pueblo de México?
En Cuba bajo la presidencia de Miguel Díaz Canel se ha acentuado la precaria situación económica, empeorando constantemente; al desabasto de todos los productos, a la restricción cada vez mayor al disenso, a la libertad de expresión y a la crítica. En la tierra de Martí están encarcelados críticos que han señalado los errores del gobierno.
Ese es el gobierno de Miguel Díaz-Canel, dictador de Cuba, quien fuera recibido el sábado en Campeche por López Obrador como su amigo, su brother, su compa, su colega, casi su cuate, su canchan chan. Gran polémica se desató en contra del presidente Andrés Manuel López Obrador tras condecorar al dictador de Cuba, Miguel Díaz-Canel con la medalla Orden Mexicana Águila Azteca. Dicha condecoración considerada como la más alta distinción que el Gobierno de México otorga a extranjeros para reconocer sus “servicios prominentes prestados a la Nación Mexicana o a la Humanidad”.
Bajo el argumento del envío a nuestro país de vacunas contra el COVID-19 y de médicos especialistas para el programa IMSS-Bienestar, López Obrador reconoció a Díaz-Canel.
Lideres de opinión pública y del periodismo reprobamos el acto que López Obrador encabezó el pasado 11 de febrero desde Campeche. Señalando al régimen de Díaz-Canel como violatorio a los Derechos Humanos y “responsable de asesinatos, torturas y prisioneros políticos”, tal cual lo expresó el periodista Jorge Ramos.
Ramos tachó a Díaz-Canel de ser “un brutal dictador” respaldándose en los reportes de Amnistía Internacional por los prisioneros políticos, las detenciones arbitrarias y la ausencia de prensa libre en el régimen. Señala como “una vergüenza y una traición” la condecoración de AMLO al dictador cubano.
No me voy a detener en el antecedente socialistoide del presidente Díaz Canel, él forma parte de la primera generación isleña con esa conciencia, él no recibió “lavado de cerebro”, él por convicción es así, así nació, más no comulgo con la lambisconera, adulante, lisonja e hipócrita posición del disminuido presidente que tenemos, ¿quién lo ha llamado al rescate de Cuba? ¿Por qué no comulga con el acto propio? ¿Candil de la calle?
Antes que ver por otro país u otros países, debe ver por el que lo eligió, bueno en una cuarta parte de su población. Debe corregir sus desviaciones, enmendar sus corruptas posiciones.
México para Cuba ha sido un buen negocio y ahora que es un mediocre escudero, debe detener sus aspiraciones continentales, hay otras obligaciones y responsabilidades que cumplir hacia adentro.
El discurso idiotizante que AMLO al estilo castrista dijo en el acto de condecoración a Díaz Canel, ya no surte efecto en la gran masa ciudadana mexicana que padece lo que le ha sucedido, encontrándose ya sumida en la pobreza ante la oligarquía encabezada por AMLO muy comparada con la de la cubana.
Por cierto, la recepción, y posterior reunión bilateral, se hizo en la ciudad de Campeche a propósito de la construcción del multi desviado Tren Maya y la utilización de balasto cubano comprado por el Gobierno mexicano para el emblemático proyecto de la 4T, ¿coincidencia o para que la gobernadora Sansores se pusiera con algo de cash como contribución a la causa?
¡Mientras tanto, les dejo un saludo con mucho afecto!
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